Ruth Cabeza es una española, de Bilbao, que llegó a Venezuela por motivos ajenos a la repostería: se estableció gracias al mismo ingrediente que saboreamos en sus postres: el amor. El nombre de su marca, La Carañola, fue designado por sus amigos e invita a pensar en esa dualidad en la que siempre viven quienes viven fuera de su tierra natal.



Su amor a la repostería comenzó en el hogar. Recuerda ver a su abuela preparando recetas cuando aún no alcanzaba el mesón de la cocina. Y, como es natural para muchos, hay aromas y sabores que le recuerdan a su infancia, como el del limón, que la transporta directamente junto a su madre.


Sin embargo asegura que no repite recetas caseras, sino que más bien, las reinventa. Investiga, prueba distintas medidas y se desvela para preparar, por ejemplo, galletas tan suaves que se deshagan en el paladar de los comensales. Pero la crema pastelera sí es la de su abuela, y le llama Nati, de "Natividad".


Entre las muchas opciones que ofrece a los dulceros de Caracas se encuentra la torta QuesOlé, la cheesecake que nos trajo hasta ella; La Carañola, que tiene al chocolate y al maní como protagonistas, la O'hara, que es una torta red velvet, inspirada en la protagonista de Lo que el viento se llevó; la Ofelia, "corazón de confitura artesanal de fresas, crema de mantequilla de merengue suizo y baño de chocolate blanco"; Miss Maní, brownie con mantequilla de maní; Galletamente, una torta hecha en honor a las galletas (o su hermana, un homenaje a las galletas Oreo) o el Sr. Brownie. Así como otras recetas mezclan sabores latinoamericanos, como la torta Alhambra del Caribe, la torta Mi Negra y la Isla Bonita.



Como buena emprendedora, Cabeza es comunity manager, delivery, atención al cliente y, por supuesto, la repostera a cargo de los sabores que no olvidarás. Su proceso es dedicado y atento pues, cada entrega va acompañada de una tarjeta de agradecimiento escrita por ella.


Puedes ordenar sus galletas, brownies y tortas –que superan los veinte tipos en el menú– para eventos o antojos personales. O para regalar.


Ella nota y valora el detalle y te hace una versión vegana o libre de gluten, si es lo que necesitas.


La contactas mediante su cuenta de Instagram: @lacarañola