
Si quieres preparar el fondant de chocolate más fácil y delicioso tienes que seguir esta receta que compartimos hoy en Dulcear.com. Este es sin duda uno de los postres convertidos en clásicos que están entre nuestros favoritos porque es delicado, elegante y muy fácil de hacer.
Su ingrediente principal es el chocolate, así que es imposible quedar mal si lo sirves en una cena importante o en una reunión de amigos. Y si lo acompañas con helado de vainilla, con un sorbete cítrico o con crema chantilly, ya estamos hablando de flotar en el aire de la emoción.
También es conocido como coulant, volcán, muerte por chocolate, o torta llorona, y esto es porque su centro es fluido, lo que lo hace increíblemente especial. El coulant fue patentado por el chef francés Michel Bras en 1981 en su restaurante de Laguiole, que cuenta con 3 estrellas Michelin. La receta original se hace en dos capas: la interna, una ganache congelada, y la externa, una masa de bizcocho. Al hornear se forma el bizcocho y la parte interna se derrite y... voilá!
Se dice que la versión más fácil, como la que te mostramos hoy, fue creada en 1987 por el chef Jean-Georges Vongerichten, también francés pero radicado en Estados Unidos. Y desde entonces hasta ahora han surgido múltiples recetas en las que cambian las proporciones pero el resultado sigue siendo esa maravilla que desparrama en la primera cucharada.
Puedes preparar el fondant de chocolate en moldes refractarios o de silicón, según lo que tengas disponible en casa. Luego puedes desmoldar o simplemente colocarle un poco de azúcar glas o una bola de helado (nuestra opción favorita) y listo.
¡Un momento! Se nos ocurrió una idea dulcera más: ¿Y si al servirlos le pones por encima, o sobre el plato, un chorro generoso de salsa de caramelo salado?
Ingredientes
Para 4 raciones
- 180 gr de chocolate oscuro.
- 2 huevos enteros + 2 yemas.
- 2 cucharadas de harina de trigo, todo uso.
- Media taza de azúcar.
- 100 gr de mantequilla.
¿Cómo se prepara el fondant de chocolate?
- Precalienta el horno a 180º C.
- Funde, en baño de maría, el chocolate (pícalo en trozos pequeños para que sea más fácil) y la mantequilla.
- Deja enfriar.
- Bate los huevos y el azúcar hasta que logres formar una mezcla cremosa.
- Agrega el chocolate fundido y continúa batiendo.
- Deja de batir y añade la harina, con movimientos envolventes.
- Vierte la mezcla en moldecitos individuales (enmantequillados y enharinados previamente).
- Hornea durante unos 8 minutos.
- Estarán listos cuando observes que se ha formado una ligera corteza.
- Voltéalos o sírvelos directamente en los envases, según tu preferencia.
- Va muy bien con helado, sorbete o alguna crema.
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