Todo lo que sale de sus manos es tan bonito que provoca retratarlo, más que comérselo. Madina Yavorskaya y su hermano Rustam Kungurov son los fundadores de Tortik Annushka, un taller de pastelería en el que se confeccionan increíbles tortas de diseño. Este emprendimiento ruso, situado en Moscú, debe su nombre a la hijita de Madina y abrió sus puertas en 2009 para combinar las pasiones de ambos por la repostería. En muy poco tiempo, los bizcochos de la novel pastelería comenzaron a resaltar por la pericia e imaginación de estos hermanos para decorarlos.

Casi diez años después, si algo caracteriza a las obras maestras que salen de la cocina de Tortik Annushka es su creatividad, su compleja construcción y la impecable ejecución de los detalles, lo cual les imprime un alto impacto visual que se mueve cómodamente entre lo juguetón, lo delicado y lo dramático. Gradualmente se han alejado de lo predecible y han forjado un sello propio, cuyos guiños han sido reproducidos como tendencias. Un ejemplo es el ahora popular aspecto “chorreado” con el que muchos reposteros adornan los bordes superiores de un pastel.

“Crear una sola torta puede tomarnos una semana. Las ideas nos llegan y las probamos o a veces van surgiendo a medida que experimentamos. Siempre trabajamos juntos y nos inspira superarnos”, explica Yavorskaya en varias entrevistas. Los estilos pictóricos de artistas como Kandinsky, Mondrian, Monet, Magritte, Klimt, Van Gogh y Warhol han servido de inspiración para decorar algunos de estos bizcochos, aunque también se pasean por armoniosas aglutinaciones de moléculas, motivos florales y orgánicos, elementos de la cultura pop, skylines urbanos y ornamentos abstractos. El toque romántico y naturalista proviene de Madina, quien ostenta un título en Bellas Artes. La mirada geométrica corre por cuenta de Rustam, quien estudió arquitectura y traduce en sus pasteles las simetrías y balances propios de una obra de ingeniería.

Estas piezas de arte comestible de varios pisos logran impresionar como muestras de técnicas sofisticadas y líneas exquisitas que combinan distintas texturas, brillos, policromías y volúmenes, así como el uso de ingredientes de primera calidad. No hay atajo posible: cero mezclas de caja ni conservantes. Los rellenos, según su sitio web, también prometen no defraudar: los hay de galletas impregnadas con jarabes de fruta, chocolate, crema de vainilla, frutas con crema batida, chocolate con maní y crema de caramelo, entre otros. De igual modo, los hermanos aseguran estar abiertos a complacer las peticiones especiales de sus clientes, pues preparan tortas para cada ocasión.

A la par, Tortik Annushka es también una academia de repostería y confitería, que ofrece cursos y clases magistrales diseñados tanto para principiantes como para profesionales. Los han dictado en París, Buenos Aires y Kuala Lumpur, entre muchas otras ciudades. En Instagram puedes saborear con la vista sus maravillosas creaciones como @tortikannuchka o visitar su web: tortik-annuchka.com.

Tortik