En La Negra Repostería Artesanal aseguran que buscan reivindicar la dulcería criolla sin menospreciar la ya tradicional con influencia europea. Luis Aníbal Palacios, creador de esta marca que despacha por encargo y distribuye también en locales aliados, afirma que a través de sus postres se puede viajar a través de los sabores a diferentes rincones del país.

María Encarnación López Coronado vivió siempre consintiendo a sus parientes y amigos con los más ricos dulces. A su familia la sostuvo por años con la repostería y tal vez sin saberlo fue una gran inspiración para sus hijos  y nietos, de allí que años después uno de ellos, Luis Aníbal Palacios, decidiera rendirle tributo dando vida a lo que hoy se llama “La Negra Repostería Artesanal, en honor a María Encarnación, su abuela.

Su esencia es la dulcería criolla, en la que combinan los secretos de la vieja y de la nueva escuela con ingredientes autóctonos. A esto se suma que cada postre que han puesto en el menú que ofrecen está basada en algún relato o tradición de las distintas regiones venezolanas.

Palacios cuenta que La Negra Repostería Artesanal nació de manera formal el primero de febrero de 2015, aunque previo a ello ya vendía ponqués en la escuela de su hija, porque ella misma lo motivó a hacerlo.

En su menú se incluyen 11 recetas y Palacios afirma que cada una es el resultado de un proceso de investigación, búsqueda de ingredientes y de detalles para la presentación.

Dentro de su lista encontrarás, por ejemplo, la torta Choroní. “Su nombre está relacionado con el vocablo indígena chorote (infusión de pasta de cacao disuelta en agua) que no sólo le da nombre a ese pueblo costero sino que inspiró esta torta de chocolate con gotas de chocolate fundido cubierta con frosting de chocolate”, indica.

También encontrarás entre sus opciones al popular 3 en 1 convertido en torta. Quienes la prueban dicen que el sabor es una réplica mejorada de la tradicional bebida preparada con jugo de naranja, zanahoria y remolacha. También puedes encontrar la torta Marisela, inspirada en la hija de Doña Barbara, la protagonista de la conocida novela de Rómulo Gallegos, que nos lleva al llano. Y para quienes quieren viajar al occidente del país la torta Chimbanguele, de cambur (banano) y plátano, con gotas de chocolate, será su boleto de partida.



 

En Instagram: @lanegrareposteria